Cuanto cuento
20/06/2010 - bloc
Ayer fui a contar con Patricia Mc Gill cuentos catalanes y latinoamericanos en un homenaje a José Artigas en el Centre Artesà Tradicionàrius. Poder contar y cantar con Patricia cuentos para niños, siempre dispuestos a entrar en el cuento, fue un placer. Y ver cómo, poco a poco, a los adultos también se les iba poniendo cara de niños, otro. A pesar del ruido de fondo, a pesar de la reverberación de la sala, a pesar del discurrir de todo, la gente estaba ahí, escuchando. Y como traca final, la alegre entrada de Ignasi Potrony y Helena Cuesta, que precisamente venían de contar en el Museo Picasso, coronando una sesión inesperadamente memorable. Tan memorable quizá como la tarta pascualina y las empanadas, que como los cuentos, aparecen algo metamorfoseadas, pero siempre deliciosas, en diferentes tradiciones, ya sea Italia o Uruguay. Y es que contar y comer suele ir siempre de la mano. Será porque ambos verbos empiezan con c, por una c que abre su boca codiciosa, ávida de los mejores bocados.
Ayer, después de contar, también contamos. Helena, Ignasi y yo seguimos barajando palabras hasta llegar al Tinta Roja, que se convirtió en un efímero punto de encuento, para compartir cuentos y repartirlos a diestro y siniestro, si se terciaba. Y se terció. Ellos dos contaron en una fiesta de cumpleaños donde los cuentos fueron el regalo sorpresa que nadie esperaba, ni nosotros mismos. Después nos regalamos cuentos unos a otros: José Manuel de Prada nos obsequió con un hermoso y melancólico cuento de la Columbia Británica, cuentos y cantos encontraron su momento y acabamos masticando pimienta y cantando, muertos de la risa, gracias a una maravillosa historia marroquí que nos regaló Catherine Favret. Y el cuento se acabó y cada uno se fue para su casa. Pero no. Al bajar del metro me encontré a Yoshi Hioki, gran narrador y escuchador, y le conté cuanto cuento anduvo suelto ayer por Barcelona. Y escuchó, contento. Y ahora sí, que la historia acaba aquí.
Me encanta esta entrada. Es verdad que ayer nos lo pasamos muy bien, como siempre que nos juntamos y contamos y comemos y continuamos camino…
Nos vemos pronto!
Besos